Una de las grandes interrogantes de esta cuarentena es la práctica del deporte.Algunos países dejan a sus ciudadanos salir a dar una pequeña vuelta por un tiempo reducido,pero otros tienen que ingeniárselas para poder hacer ejercicio en su casa.
¡Aquí tenemos un claro ejemplo de que no es imposible!
Les presentamos a Yim Heng Fatt, quien decidió sacar el máximo provecho físico de estos días de cuarentena y armó una rutina de ejercicio algo impensada para un espacio tan reducido como el de una casa: corrió 263 kilómetros durante 36 horas seguidas, todo sin salir de la comodidad de su hogar. Sólo paró para comer, ducharse y descansar por períodos cortos.
El corredor quería probarle a sus colegas que es posible mantenerse físicamente activo y correr dentro de casa en estos tiempos de cuarentena, aunque no sea tan eficiente como un buen trote en el parque o la calle, por ejemplo. Fatt definió una ruta de 50 metros que pasa por su salón, vestíbulo, cocina y comedor.
Fatt incluso encontró varias ventajas a la hora de correr dentro de casa, que no podrían darse naturalmente en un ambiente al aire libre. En primer lugar, está su «estación de hidratación», es decir, su refrigerador abierto con bebidas frías e isotónicas dentro, además de unos cuantos panes para recuperar energía. Incluso, dijo que cada 50 kilómetros celebraba tomándose una cerveza.
Por otra parte, la segunda ventaja vendría siendo el benévolo clima y la posibilidad de manejarlo a gusto:
«Tienes la habilidad de controlar el clima. Cuando se pone muy caluroso y abochornado al caer la noche, pongo los ventiladores o incluso el aire acondicionado».
Yim Heng Fatt al Malay Mail
Pero la tercera razón es por lejos la que más nos convence, y es que «virtualmente puedes correr desnudo».
Si eso no es un incentivo suficiente para hacer ejercicio en casa, ya no sabemos qué más lo puede ser…
Fuente:
UPSOCL
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