Freddie Mercury es una de las personalidades más emblemáticas del mundo de la música.
Su apariencia, talento, extravagancias y presencia en el escenario lo colocaron en un estatus de showman al que muy pocos han podido aspirar.
Por ello no es de extrañar que el extinto cantante sea el centro del drama biográfico Bohemian Rhapsody: La historia de Freddie Mercury, producción de Twentieth Century Fox protagonizada por Rami Malek (Mr. Robot) en el papel principal y dirigido por Bryan Singer, responsable de varias entradas de la saga fílmica X-Men, así como de la película de culto Sospechosos comunes.
La atención hacia la película no solo está centrada en el desempeño de Malik como Mercury, sino también en cuánta coherencia guardó como filme en sí mismo, pues detrás de cámaras hubo escándalos que mermaron el rodaje.
A finales de 2017, Singer fue acusado de acoso sexual y Fox decidió despedirlo antes de que concluyera la filmación. Para no dejar el producto sin terminar, el estudio metió de reemplazo al cineasta Dexter Fletcher y ahora la incertidumbre gira en torno a cuánta disparidad en tono y enfoque tendrá la película.
Pero Bohemian Rhapsody: La historia de Freddie Mercury es un filme que enfrentó problemas desde antes de que iniciara su rodaje.
Con la salida de Singer, nadie sabe qué se puede esperar de Bohemian Rhapsody: La historia de Freddie Mercury, pero las dudas se disiparán cuando estrene en México el próximo 2 de noviembre.
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